martes, 10 de julio de 2012


Los actores inmersos en el conflicto


Empresas mineras

Las mineras tienen como objetivo primigenio implementar el proyecto y generar ganancias. Ellas, esperan tener las reglas claras que garanticen que su inversión sea segura. Si mantienen actividades de responsabilidad social suelen estar orientadas a minimizar el descontento de la población local, más que al desarrollo real o genuino de la misma población. Están consientes de que desarrollar un nuevo proyceto minero traerá protestas, y que necesitan una “licencia social”  que disminuya las tensiones entre la empresa y la comunidad, para disminuir la probabilidad de una protesta. Aunque, si llega a producirse, se ven en necesidad de “aquietarla” y, para esto, intentan controlar la situación, concertando o elevando campañas para crear una opinión pública que les sea favorable a su posición. En conclusión, suelen buscar controlar las situaciones locales de forma voluntaria y libremente determinada, como los mínimos marcos legales regulatorios.








Las comunidades locales se perciben involucradas en conflictos mineros cuando estos llegan de “afuera”, que terminan alterando sus vidas. Los casos de conflicto e pueden catalogar en dos. El primero es cuando ya se implementó el proyecto minero y, el segundo, cuando se pretende iniciar una nueva operación.
La comunidades locales suelen manifestar reclamos ante las empresas por el hecho de que hay un “cambio acumulado sobre la forma de vida anterior a las operaciones mineras y la sensación de desgobierno sobre el propio destino” (Tanaka. 2005).
Las colectividades locales suelen reclamar empleo y obras, pero como las empresas requieren de personal altamente calificado, esta necesidad no se satisface del todo; por tanto, los mejores resultados se tienen con obras de infraestructura. Esta política asumida por las empresas resulta en una suerte de reemplazo del Estado por agentes privados, aunque la población lo recibe de buena manera, pues suele ser pobre y con muchas carencias.
Las relaciones entre las empresas y las colectividades locales se observa con desconfianza y escasa credibilidad, para con las acciones y promesas entre ambos.
Las colectividades locales se ven atadas, además, por una posición de debilidad económica, técnica-legal e incluso cultural.




El Estado

 El Estado muestra “un marcado contraste entre sus funciones reconocidas en la Constitución y los reclamos de las comunidades locales frente a su comportamiento en el desarrollo de los conflictos” (Tanaka. 2005).  La preocupación del Estado se proyecta en dos puntos:; 1. Mantener el orden público y 2. Evitar que las protestas desalienten la inversión minera. Lo que pretende, en el fondo es que la población acepte y se conforme, pero esta poco dispuesto al diálogo y que este determine que el proyecto minero no se lleve a cabo. Esto refleja un Estado “más inclinado hacia la promoción de la inversión que a la regulación y redistribución efectiva".


Panorama de los Conflictos Mineros

“Los conflictos pueden ser visualizados como una serie de acontecimientos organizados alrededor de las diferencias construidas entre los actores locales y las empresas mineras y las posiciones ya cciones emprendidas por ambos tipos de agentes a lo largo del tiempo”(Tanaka, Huber. 2005)

¿Qué ocurre cuando una empresa minera se asienta en una sociedad local y se generan fricciones entre ambas? ¿Qué factores determinan que se gesten y evolucionen los conflictos mineros?  Preguntas como estas no son nuevas y se fijan en torno a la implementación de operaciones en industrias extractivas y al uso de recursos no renovables. El análisis a continuación se basa, y adapta,  en el estudio “Minería y conflicto social” (Tanaka, Huber. 2005) en el que se toma en consideración conflictos más que conocidos de actividades de compañías mineras, como son: Tambogrande (Piura), Majaz(Piura), Yanacocha (Cajamarca), Antamina (Ancash) , Tintaya (Cusco) y Las Bambas (Apurímac).
Durante el trabajo se plantea que los conflicto mineros no pueden ser resueltos sino solo transformados; por ende es posible que se establezcan condiciones que permitan visualizar el paso de un conflicto de baja intensidad a conflictos violentos de forma directa y abierta.
A medida que se desarrollan las protestas se produce una interacción entre los actores m la que se puede definir en dos “movimientos” 1. “aproximaciones” que refiere que entre las partes hay vínculos positivos que general diálogo y soluciones y 2. “polarizaciones” que son acciones uqe generan, o acrecientan, las diferencias entre posiciones contrapuestas.
Dentro de los conflictos el Estado se muestra, en general, orientado a resolver los problemas generados cuando los conflictos han generado estallidos, más que a solucionar las causas que los generaron.

Marcha Nacional del Agua. Fotografías por Alberto Távara.

Quise compartir con ustedes las fotografías tomadas por mi amigo Alberto Távara el día de la Marcha Nacional por el Agua. Realizada en el centro de Lima, desde la Plaza Dos de Mayo, pasando por Wilson, la Plaza Grau, la avenida Grau, un tramo pequeño de Abancay y directo hasta la Plaza San Martín, en donde se realizó un mitin pacífico.











































Panorama de los actores y organizaciones

Estado peruano: Su interés está en promover la inversión privada a partir del sector minero, ya que es una fuente considerable de divisas; además se encarga de regular el control ambiental, para esto se vale del Ministerio de Energía y Minas, la Dirección General de Minería, la Dirección General de Medio Ambiente y el Registro Público de Minería. Otros entes reguladores Dirección General de Salud Ambiental (DIGESA), Comisión Nacional de Medio Ambiente, Comité Especial de Privatizaciones y la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (SUNAT). Instancias adicionales se presentan en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones y por último el Ministerio de Educación.

ONG's: Se insertan a modo de “facilitar procesos de diálogo y concertación para la resolución de conflictos sociales y ambientales (…) facilitar procesos de superación de las asimetrías propias de un conflicto socioambiental a partir del apoyo a las poblaciones locales (…) orientan su labor a defender los efectos de los proyectos e inversión sobre la ecología u los actores” (MMSD. 2001).

Sector corporativo: Su principal objetivo es el de invertir para maximizar sus ganancias. Se puede dividir en moderno y tradicional. La mayoría están representadas por la Sociedad Nacional de Minería,  Petróleo  y Energía (SNMPE).
Las empresas nacionales que se han modernizado sueles pertenecer a grupos tradicionales que lograron profesionalizar su gestión, como el grupo Benavides (Buenaventura), Hochschild, Baertl (Milpo), etc. Estos grupos han generado alianzas con empresas extranjeras para explotación y exploración, Buenaventura y Newpont en Yanacocha). Otra característica es que han tomado créditos internacionales para modernizar y ampliar sus operaciones.
A excepción de Southern Perú (Grupo México) la mayor parte de empresas extranjeras se han insertado en el mercado peruano por la promulgación de la Ley de promoción de promoción extranjera (1992); adquiriendo empresas estatales por privatización como sucedió con Phelps Dodge (Cerro Verde, antes adquirida por  Cyprux Amax), BHP  Billinton Tintaya, a la actualidadasimilada por Xstrata Copper Tintaya, Cominco (Refinería de Cajamarquilla), Shougang (Marcona) y Doe Run (Centromín Perú), etc. Proporciones menores se han embarcado en nuevos proyectos como Antamina (Noranda, Billinton, antes rio Algom, y Teck), Pierina (Barrick Misquichilca), Yanacocha (Newmont y Buenaventura). Por su parte, empresas junior canadienses exploran nuevos yacimientos. (Glave, Kuramoto. 2001).
Empresas modernas se mantienen a favor de una política minera que promocione incentivos y estabilidad tributaria; así como se declaran a favor de un manejo medioambiental y políticas con responsabilidad social.
 Las empresas mineras tradicionales no aprovecharon el marco promocional de la legislación minería peruana, en tanto que usan tecnología obsoleta y sus posibilidades de enfrentarse a coyunturas de precios bajos han sido mínimas.

Comunidades locales: Son heterogéneas, pero se agrupan y firman alianzas en función a la posición asumida ante el conflicto. La mayor parte son comunidades campesinas y/o pequeños caseríos. No se incluye, dentro del estudio, a las comunidades indígenas amazónicas, que están agrupadas en el Consejo Nacional de Pueblos Indígenas (CONAP) y la Asociación Interétnica para el Desarrollo de Pueblos (AIDESEP). Durante las gestiones de un conflicto las comunidades no se encuentran cohesionadas, lo que implica debilidad dentro del tejido social.

CONACAMI, es  la Confederación Nacional de Comunidades del Perú Afectadas por al Minería y, tiene representación para con la temática ambiental de forma orgánica, se funda en 1999 a consecuencia del Primer Congreso Nacional de Comunidades Afectadas por la Minería, llevado a cabo en Lima- Perú; como “respuesta al crecimiento del sector que se muestra claramente en el indicador de la ampliación de la frontera minera pasando de 4 millones a 24 millones de hectáreas, muchas de las cuales se superponen  con áreas de comunidades campesinas , especialmente en la zona andina. Tres temas centrales tratados en el primer congreso fueron:
1.      El derecho a la tierra y al agua.
2.      El impacto social y ambiental de la actividad minera.
3.      Estrategia de organización y resolución de conflictos.
4.      Estos puntos intentan dejar de lado el esquema de “negociar  para obtener compensación y no para construirse un futuro”

Gobiernos locales: Se han demostrado claves para el debate del monto y redistribución del canon minero. Durante el año 2001 se inició la conformación de la Asociación de Municipalidades de Zonas Mineras, con un comité que abarca 5 alcaldes: Espinar (Cusco), Ilo, Cerro de Pasco, Yauli y Carhuaz.

Reinhard Seifert y Peter Koenig. Razones de la inviabilidad de Conga 14-...



Lo que no nos dicen del Proyecto minero Conga. Lúcida entrevista a dos especialistas en el tema.

CONGA, LAS RAZONES DEL NO



Sentir de pobladores cajamarquinos en función al proyecto minero Conga. Vídeo publicado en abril de 2012.


Marcha Nacional del agua 2012

martes, 3 de julio de 2012



La Minería y el conflicto social en el Perú
Desde inicios de la década de los noventa la minería en el Perú asumió un rol protagónico, y cada vez más importante, dentro del escenario político y económico nacional.  A partir de este punto los gobiernos implementaron una serie de reformas que pretendían “facilitar las inversiones orientadas a la exploración de los recursos mineros (…)y a mitigar los impactos  negativos que pudiera tener esta explotación” (Economía y Sociedad 65, CIES, octubre 2007).

Según las fuentes, al año 2001 se tenía información acerca de 47 conflictos relacionados a la actividad minera: 38% en el sur del país, 34% en el norte y 28% en el centro. Para los mismos la minería cobra importancia a partir de fines de la década de los 50, en la zona sur, con el desarrollo del yacimiento de Toquepala. La mirada se vuelca a la zona norte con el desarrollo de yacimientos como Yanacocha, Pierina y Antamina, en la década de los 90.

De acuerdo a la fuente (Glave, Kuramoto. 2001)  y su mapa de conflictos, estos se generan de acuerdo a:

·          Agua 60%
·          Tierra y territorio 15%
·          Aire 11%
·          Uso alternativo de recursos 6%
·          Participación 6%
·          Accidente 2%















































Para los conflictos agua y tierra y territorio se tiene que se relacionan con la manera “en que las empresas compraron o adquirieron las tierras para iniciar sus operaciones”, como en Yanacocha, Antamina y Tintaya. Los relacionados con la calidad de aire implican lugares de fundición o refinadoras, La Oroya e Ilo. El uso alternativo del recurso y la participación se generan por el miedo de la población  con que la actividad minera genere impactos que impidan otras actividades, ya sean reales o potenciales.Como ejemplo se ubica a Tambogrande, desarrollar la mina significaba reubicar a la población y a los fundos agrícolas de producción. Otro ejemplo se dio en Huancabamba (Majaz) ya que la población prefería que se diera espacio a la actividad turística en las lagunas Huaringas, ubicadas en la parte alta de la cuenca.

Otro conflicto se genera por el inicio de operaciones sin previa licencia social, esto ocurre cuando las autoridades autorizan el funcionamiento pero, como la población no ha sido bien informada se rehúsa a que se ponga en marcha la mina.

Los conflictos por accidentes, Choropampa, revelan la falta de previsión de riesgos de la empresa y sus contratistas; Yanacocha es otro ejemplo por la falta de transparencia en el manejo y la compensación por el accidente.

Cuando el conflicto se relaciona al agua, se puede remitir a contaminación por aguas ácidas y el estado de lagos y ríos; empresas de envergadura involucradas son Doe Run y Tintaya, por deposición de relaves en Cañipía.





VENTAJAS Y DESVENTAJAS DE LA ACTIVIDAD MINERA

En vista que el Perú es un país minero por excelencia, se debe hacer un recuento de cuáles son las ventajas y desventajas que esta actividad genera  en nuestro país, ya sea en la sociedad o  en el ambiente. Esta actividad esta interrelacionada con muchos sectores, tiene un efecto sobre cada uno de ellos, se debe analizar a fondo el efecto que esta genera sobre la salud, la economía, el trabajo, y el medio  ambiente.
En el Perú existen dos clases de minería claramente diferenciadas, la  minería industrial o legal que está sujeta a normas estrictas de responsabilidad social y ambiental y que paga tributos, y la  minería informal o ilegal, que no está sujeta a norma alguna.


Ventajas de la minería industrial

Es una gran fuente de desarrollo, fuente de trabajo. La actividad minera es un importante motor del desarrollo de la economía, lo ha sido en tiempos pasados y tiene una tendencia positiva a crecer en la actualidad.

Contribuye  con las exportaciones gracias a su orientación al mercado internacional.


Los impuestos que recibe el estado, el canon minero otorgado a los  gobiernos locales (municipalidades distritales y provinciales) y regionales de zonas extractivas.


DISTRIBUCIÓN DEL CANON MINERO

El 10% va para los gobiernos locales del distrito o distritos donde se explota el recurso natural. De ello, 30% debe destinarse a la inversión productiva para el  desarrollo sostenible de las comunidades de la zona.
25% se distribuye entre los gobiernos locales distritales y provinciales de la zona donde se explota el recurso natural.
40% les corresponde a los gobiernos locales distritales y provinciales del departamento o departamentos donde se explota el recurso natural.
25% va dirigido al Gobierno Regional, el cual destina el 205 de éste monto a las universidades del departamento.
                                                 
Acatan normas de responsabilidad social, que se encuentran en el rubro de:
Educación.
Salud.
Nutrición.
Gestión Ambiental.
Empleo Local.
Economía Local.
Infraestructura.
Desarrollo y Fortalecimiento de Capacidades de Instituciones Locales, Sociedad Civil y no Organizada.
Promoción de la cultura y costumbres locales.
La utilización de tecnologías limpias.


Desventajas

Los problemas de la minería son  originados tanto como por la minería legal, como por la minería ilegal.

Básicamente las desventajas son los efectos que esta actividad genera en el ambiente y en la salud de la población o de sus trabajadores.

La minería ilegal  desarrolla  su actividad al margen de la ley, sin cumplir  ninguna clase de responsabilidad social ni medio ambiental, como esta clase de minería no cumple con ley, no es regulada por las entidades encargadas, es así como la salud de los trabajadores se puede ver afectada,  son empleados en largas faenas con  bajas remuneraciones, disminuyendo así su calidad de vida, hasta han existido casos de esclavitud,  caso alarmante en la actualidad. Ellos tampoco realizan estudios previos de impacto ambiental para el inicio de sus actividades, por lo cual no se prevé los impactos ambientales ni sociales, ni se toma en cuenta la manera de trata de desechos y desmonte.


Las técnicas empleadas en la minería ilegal como legal son muy similares, la diferencia radica en los sistemas de seguridad en el proceso. El efecto ambiental de la industria minera produce contaminantes potenciales que afectan al agua y al aire. En el medio natural los excesos pueden generarse por drenajes de agua de minas, de desmontes o de relaves mineros. Algunos metales, como cadmio y mercurio, y metaloides como antimonio o arsénico, los cuales son muy comunes en pequeñas cantidades en depósitos metálicos son altamente tóxicos, aun en pequeñas cantidades, particularmente en forma soluble, la cual puede ser absorbida por los organismos vivos (Torres 2003:81). La contaminación en el aire se manifiesta a través de polvos y gases contaminantes. El polvo procede de la descarga de mineral y desmonte en camiones, ferrocarriles, tal vez, fajas transportadoras, etc. Por otro lado, los contaminantes gaseosos pueden ser partículas sólidas en suspensión y emanaciones gaseosas, siendo el más significativo el dióxido de azufre (MINISTERIO DE ENERGÍA Y MINAS 1993:46).

Otro punto importante que se debe tener en cuenta es la reacción de la sociedad ante esta actividad, en la actualidad se están desencadenando conflictos sociales, huelgas, paros por el descontento de la gente, gracias a las irregularidades, y la falta de gestión asertiva del gobierno.

Como se pude observar la minería no es perjudicial en sí misma, es una gran fuente de trabajo, colaborador del incremento de la economía del país, sin embargo existen irregularidades socios económicos y medioambientales que deben ser con urgencia tomadas en cuenta y observadas por el ente regulador MEN.



La importancia de la minería en el Perú


El aporte de la Minería al desarrollo económico y social del país se puede apreciar por los indicadores económicos: más del 5.7% del PBI nacional es producido por la minería, así como más del 59% de la exportaciones totales es producto de esta actividad. Así mismo en el período de 1998 al 2009, el sector minero ha invertido  US $ 15,863 Millones de Dólares, lo cual ha aportado a generar fuentes de trabajo, dinamizando la economía nacional y regional. El Perú es el segundo mayor productor del mundo de plata y cobre, el tercer mayor productor de zinc, el cuarto mayor productor de plomo y el sexto mayor productor de oro. Además, de  poseer otros recursos naturales (como el gas natural, los peces y la madera). Sin embargo, es un país pobre. El sector minero se caracteriza pues por la desconfianza entre sus principales agentes y su tendencia a los conflictos sociales.




Gráfico N°1:Posición del Perúen el ranking mundial de producción minera.2011.
Fuente: U.S.Geological Survey -USGS-, The Silver Institute; Gold Fields Minerals Services -GFMS- International Copper Study Group -ICSG-; Internatonal Lead and Zinc Study Group -ILZSG- International Tin Research Institute- ITRI.; International Molybdenum Association -IMOA- Instituto Latinoamericano del Hierro y el Acero - ILAFA-.


Durante los primeros años de la década de 1980 el desarrollo minero estuvo principalmente a cargo de empresas estatales, centradas en la exportación de metales como el hierro, el cobre y la plata. Durante el  gobierno de Fujimori  se inició, como parte de una primera generación de reformas, un proceso integral de privatización del sector y se estableció un atractivo ambiente institucional para la inversión en el sector. Este proceso mejoró la competitividad, estimuló el crecimiento de la inversión privada sectorial en exploración y producción de minerales, y contribuyó a que el Perú lograra unas cifras de producción mineral excepcionales en relación con las mundiales.

El país está beneficiado de numerosas reservas minerales identificadas y de unas condiciones y estructuras geológicas importantes y atractivas. Hasta principios de la década de 1990 el cobre, el cinc, el plomo, la plata y el hierro representaban alrededor de 97 por ciento de las exportaciones minerales, lo que le permitía tener una estructura de exportaciones de minerales diversificada y cierta estabilidad frente a las  fluctuaciones de precios de los productos primarios. Hacia inicios del  2000,  el oro se fue convirtiendo rápidamente en uno de los principales productos minerales, al punto que llegó a representar 34 por ciento de las exportaciones minerales en el año (frente a 20 por ciento a comienzos de 1990). Además, según el Ministerio de Energía y Minas (MEM), el volumen de oro producido entre 2000 y 2003 aumentó en 23 por ciento. El Perú aporta hoy 6,1 por ciento de la producción de oro del mundo.
























































En la actualidad, la industria minera por un lado despierta esperanzas y por otro lado las defrauda. Desde el punto de vista macroeconómico, el sector minero es extremadamente importante, pues representa 59%  del conjunto de las exportaciones peruanas y 5.7 % del producto bruto interno en 2011 (BCR 2012). Desde 1992 la industria ha atraído inversiones internas e internacionales por un monto superior a los 10 mil millones de dólares. Entre 2001 y 2003 el sector minero concentró 37 por ciento de la inversión extranjera total en el Perú. En 2003, el sector aportó 4,5 por ciento de los ingresos fiscales estatales, y, a pesar de ser un sector intensivo en capital, emplea a más de 70 mil personas de manera directa y a 350 mil de forma indirecta, muchas de ellas en las zonas más pobres del país. Y por encima de todo, estimulado por las privatizaciones y por otras reformas desde comienzos de la década de 1990, la industria minera es un sector de crecimiento rápido. Durante los últimos diez años la tasa anual promedio de crecimiento del PBI ha sido de 6 por ciento, mientras que la del sector minero ha alcanzado, en promedio, 10 por ciento.




 
Gráfico 2: Principales socios comerciales de la minería